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sábado, 30 de junio de 2012

El chupetero de Alicia DIY


Alicia nacerá el próximo mes de agosto y ya desde la cuna va a poder presumir de chupetero. Cuando sea un poco más grande y vaya al parque, incluso podrá hacerse la chulita luciendo su zapatito personalizado con su chupete colgado de la ropita. Vaya suerte lo de ser peque, todo ventajas.

Como ya conté AQUI, no es que tenga yo muchos niños alrededor precisamente y el único chupetero que había hecho había sido para niño en forma de coche. Un coche muy molón, eso sí que podéis ver en el blog Loulou&Cía. No se me acababa de ocurrir cómo hacer un chupetero para una niña hasta que un día me levanté con la idea como si fuera una revelación. A mí me pasan mucho estas cosas, de repente me despierto con una súper idea como si hubiera estado discurriendo toda la noche y, si es fin de semana, no puedo evitar levantarme para ponerla en marcha ¡¡¡aunque sean las 6 de la mañana y luego me tenga que echar la siesta!!!

Lo primero que hice fue un boceto para ver cómo quedaría y determinar el tamaño (bastante curte, por cierto, que yo no destaco por mis dotes artísticas precisamente) 

{Boceto cutrillo}

A continuación recorté el patrón y a partir de él, las formas en el fieltro. 

{Patrones y recortes de fieltro}

Estas cosas tan pequeñitas las suelo coser enteras a mano porque con la máquina me resulta muchísimo más difícil y no tengo tanta precisión. Lo primero que cosí  fue la parte blanca a la base rosa del zapato. Después hice la florecita, la cosí a la hebilla del zapato y cosí el nombre de Alicia.

{Base del zapatito y la flor a medias}

Una vez preparada la hebilla, la cosí a la base del zapato y, con esto, la parte de arriba del zapatito ya está terminada.

{Parte de arriba del zapatito terminada}

La parte de abajo del zapato es exactamente igual que la base rosa, pero en color blanco. Con un poco de cuidado y utilizando hilo rosa, cosí la parte de arriba a la de abajo. No quería que las puntadas rosas se vieran por la parte blanca, así que por eso digo lo de "con un poco de cuidado". No es difícil hacerlo porque el fieltro es una tela gordita que permite dar las puntadas por el centro sin traspasarlo completamente.

{Recorte de la planta del zapato}

Antes de terminar de coser las dos partes, introduje el relleno para que el zapato no quedase completamente plano. Una vez introducido, terminé de coser la parte de arriba y pasé a coser la parte de abajo con hilo blanco y sin traspasar del todo para que no se vieran las puntadas en la parte rosita (igual que antes, vaya).

{Agujerito para meter el relleno}

Y con estos simples pasos, tenemos el zapatito terminado ¡¡¡y la mar de mono que ha quedado!!! Puede parecer un poco laborioso pero es muy entretenido y yo (todo hay que decirlo) disfruto como una enana haciéndolo.
{El zapatito de fieltro terminado}

Para convertir nuestro zapatito de fieltro en un chupetero necesitamos una pinza de tirantes y una cinta. Ambas cosas las venden en cualquier mercería.

{Cinta y pinza para el chupetero}

Cosemos bien la cinta al zapatito de fieltro. Aunque no se ve en la foto, yo cosí primero la cinta estirada al zapato y después la doblé y la cosí nuevamente. Supongo que cuando sea un poco más grande, Alicia se dedicará a tirar del zapatito como si la vida le fuera en ello, así que cuanto más resistente sea el cosido, mejor que mejor.

{Cosiendo la cinta}

Hacemos un dobladillo en el otro extremo de la cinta, cosemos el velcro ¡¡¡y ya tenemos el chupetero listo!!!!! ¿Fácil verdad?

{Cosiendo el velcro}

Como el chupetero era para regalo, busqué una cajita bien chula, la rellené con un poco de papel de seda, le puse el característico floripondio de Cosas de Princesas....

{Cajita de regalo, con floripondio incluído}

 ... metí unos caramelitos en la caja para la dulce espera .... ¡¡¡y camino de Madrid se fue mi chupetero!!!

{Chupetero listo para regalar}

 Ahora sólo falta que venga Alicia, que estrene su chupetero nuevo y que alguien me envíe una foto para verle la carita a la princesa. ¡¡¡Ya estoy ansiosa!!!   

miércoles, 27 de junio de 2012

Pon un sticker en tu vida ... o en tu casa

Hay veces que la cosa más tonta te puede arruinar el día, pero también es verdad que hay otras que  en un momentín son capaces de alejar los malos rollos, alegrarte e incluso sacarte una sonrisa.

{Regar el amor una vez al día}

El otro día encontramos por casualidad en una librería un sticker que, en cuanto lo vimos, no tuvimos duda de que estaba hecho para el pasillo de nuestra casa. Desde el principio estuvo claro dónde lo pondríamos: en el sitio por el que más pasamos, que es un trocito de pasillo entre la zona de las habitaciones y el salón. Es una zona muy luminosa y al ser rojo sobre pared blanca destaca muchísimo. Da un toque muy alegre y es casi imposible no verlo al pasar.

{El sticker en mi pasillo}

Es de la marca Chis Pum y lo podéis ver también en nergo pinchando aquí. Cuando lo compramos y vi la marca, al principio no sabía de qué me sonaba este nombre hasta que días más tarde ya caí en la cuenta de que había visto otros vinilos decorativos de esta marca en la revista Kireei en papel de este invierno. Todo un pozo de sabiduría estas chicas. Por cierto, tengo que ir corriendo a comprarme el número 2 porque el número 1 me encantó.

{Un mensaje importante ... y muy alegre}

Aparte de darle alegría a la casa, es una de las primeras cosas que veo cuando llego a casa y la excusa perfecta para pedir mimos extra, ¿o no?

sábado, 23 de junio de 2012

Una panorámica del Palacio de La Magdalena

El Palacio de La Magdalena es un bonito edificio construido a principios del siglo XX para que el rey Alfonso XIII y su familia pasaran en Santander sus vacaciones de verano. Vamos, el Palacio de Marivent de hace un siglo.
Está situado en la península de La Magdalena, un lugar realmente bonito con jardines, un parque, playas, un mini-zoo y una vista privilegiada sobre el mar y la bahía de Santander. Eso de que los reyes vayan a veranear a una ciudad tiene que estar muy bien en algunos aspectos pero, para ser sinceros, yo me alegro muchísimo de que finalmente decidieran devolver el "regalo" a la ciudad y ahora podamos disfrutarlo todos.

{Palacio de La Magdalena}

Esta fotografía del principio es una panorámica que he hecho con Photomerge. En este afán mío por contar cómo hacer cosas bonitas, me pareció buena idea hacer un tutorial sobre cómo hacer una panorámica. La temática no acababa de encajar bien con mi blog, así que he hecho una pequeña colaboración con el de Carlos, que está más orientado a estas cosas. En el tutorial se explica paso a paso cómo convertir varias fotos normales y corrientes en una panorámica chula, así que si lo queréis ver sólo tenéis que visitar Cabite Photography pinchando aquí.


Estas fotos son de una tarde de domingo de hace un par de semanas. Una de las cosas que me encantan de la fotografía es que, a través del objetivo, las mismas cosas se ven cada día de una forma distinta. ¿Cuántas veces habré ido a La Magdalena? Muchísimas ¿Cuántas veces volveré a sacar estas mismas fotos? Ninguna.


Además, para nosotros un día normal y corriente en un sitio en que hemos estado mil veces antes se convierte en toda una aventura si hay una cámara de por medio... ¿quién da más?



sábado, 16 de junio de 2012

In love - Nikkor 50 mm

Hay veces que te esfuerzas en resistirte a las cosas simplemente por cabezonería y cuando llegan más tarde te preguntas eso de ¿¿¿y por qué no lo habré hecho yo antes???

Eso es lo que ha pasado con el objetivo 50 mm fijo que se ha comprado Carlos. Desde hace tiempo él lo quería, el pobre, hasta el punto de que ya nos sabemos de memoria el escaparate de Zoom y la "colección" de objetivos que tienen en las tiendas de todo Santander. Menos mal que a veces no hace ni caso a "doña NO" y al final se lo ha comprado... eso sí, ¡¡¡aprovechando que yo no estaba!!!

Después de tanto hablarme de las maravillas de su objetivo nuevo, el fin de semana pasado me lo prestó con su cámara, que para él es su mayor tesoro en este planeta. Eso sí que es amor, porque teniendo en cuenta el desastre que soy yo, el pobre debió estar con los nervios de punta hasta que se la devolví... sana y salva, eso sí. 

Aprovechando que había salido el solete, fuimos al parque de Mataleñas a hacer fotos de flores y el resultado no me puede gustar más: colores vivos, luminosidad, enfoque, extraordinaria nitidez... y esos desenfoques que sólo se pueden conseguir bajando a 1.4. Con mi cámara hacer esto es simplemente IMPOSIBLE, así que cuando volvimos a casa y descargamos las fotos casi no me podía ni creer lo que veía. 

Las fotos de flores me gustan mucho y ya he perdido la cuenta de las horas que he pasado viendo la galería de Ashu Mittal, por ejemplo. Hasta ahora mi gran pregunta era cómo se conseguían esos bokeh (desenfoques del fondo) tan bonitos con esos circulitos reflejando la luz por todos lados... Aunque aún me queda muchisisisisisisimo para hacer unas fotos tan bonitas como las de Ashu, creo que el 50 mm es una buena pista. 

Dicen que la felicidad son pequeñas cosas y para mí, o mejor dicho para nosotros, estos momentos no tienen precio. No se trata de hacer las mejores fotos del mundo ni tener la mejor cámara ni de que te salga todo perfecto a la primera. Para nosotros la fotografía es como un mar en el que vamos navegando poco a poco, los dos en la misma barca y remando en el mismo sentido. Me gustan las excursiones improvisadas (aunque sean sólo de casa a la Magdalena), los debates sobre si mejor nos ponemos aquí o allá, las fotos que le hago a Carlos mientras él está haciendo sus fotos, las explicaciones sobre iluminación, composición ó lo que se tercie, los reflejos en los días de lluvia, los trucos de Mellado, la ilusión de aprender cosas nuevas y, sobre todo, hacer juntos algo que nos gusta a los dos. Es como una terapia de conexión y bonitismo.


{Peonías}

{Margaritas}

{Clavelinas}

{Campanillas}

{Margaritas}

{Peonías}

{Alegrías}

martes, 12 de junio de 2012

Dispara y luego apunta

Cada día por la mañana, nada más levantarme una de las primeras cosas que hago es encender el ordenador. Mientras carga desayuno y a veces tengo conversaciones con Carlos de las que por la noche ni siquiera me acuerdo. Le veo cómo se va a trabajar y comienza mi día.
Después del desayuno me siento frente a la pantalla con la "excusa" de consultar el tiempo pero la verdad es que es mi rato de leer los blogs que me gustan. Podría levantarme más tarde y aprovechar para dormir más por las mañanas pero entonces me perdería estos ratos que, para mí, son de lo mejocito del día.
Esta mañana, sólo he podido ver la entrada que ha publicado Lucía Be. No me ha dado tiempo a más porque me he quedado tan flipada con un vídeo que contenía el post que lo he tenido que escuchar dos veces a falta de una.
Mi "filosofía" no contempla el copy-paste en el blog y no soy de las que se vale del trabajo ajeno para publicar más frecuentemente (que de eso hay mucho por ahí) pero creo que estoy en la obligación de hacerme eco de lo que dice Sergio Fernández en esta entrevista.
Es un mensaje de optimismo, un soplo de aire fresco dentro de este ambiente enrarecido en que nos movemos. Ya vale de tanta crisis, tanta prima de riesgo, tanto politiqueo y tanto telediario de las 3. Podemos hacer las cosas de otra manera, sólo escucha.

jueves, 7 de junio de 2012

Cómo crear tu firma en Photoshop CS5


Hacía tiempo que quería cambiar la firma que utilizo en mis fotos o, mejor dicho, crear una un poco decente. A veces paso horas visitando galerías en Flickr y me encanta encontrar fotos bonitas con firmas chulas. En el fondo, ya sea en un blog ó en una galería de fotos, lo que muestras es un poco de tí así que una firma con personalidad me parece importante también.

A mí me gustan las cosas sencillas y creo que he encontrado al fin una firma que tiene bastante que ver conmigo. La anterior la era bastante feílla, la verdad, pero no se me acababa de ocurrir una idea nueva para sustituirla... hasta ahora. Al final no ha sido tan difícil, es cuestión de ponerse, como todo: abrir un lienzo en blanco en Photoshop y pintar un rato hasta que te salga algo que te guste. A mí, mi nueva firma me gusta mucho.


Una vez creada la firma en Photoshop como un nuevo pincel, es posible utilizar el color que más te guste ó que mejor le pegue a la foto. Todo ventajas. Vamos a ver cómo hacer una firma nueva:

1) Abrimos un archivo nuevo en Photoshop

2) Escribimos y/o dibujamos lo que queramos que sea nuestra firma. En primer lugar, he dibujado la "e" utilizando el siguiente pincel:

3) Para escrbir el resto he utilizado la herramienta "Texto" . Estirando de los bordes, elegiremos el tamaño que más nos guste.

 Ya tenemos los dos elementos que formarán la nueva firma.
4) Utilizando la herramienta "Mover" , ponemos el texto sobre la "e" que hemos dibujado:
5) Tenemos dos capas: una corresponde a la "e" y la otra al texto. Las convertimos en una sola capa pinchando en el botón derecho del ratón --> "Combinar visibles"


6) Utilizamos la herramienta "recortar"  para quedarnos únicamente con el área que queramos que ocupe nuestro pincel. Recortamos y pinchamos ok


7) Ya tenemos lista la imagen que será nuestra firma. Para convertirla en un nuevo pincel y así poderla utilizar cuando queramos, pinchamos en  Edición --> Definir valor de pincel.

8) El nuevo pincel ya está añadido a la paleta. Para acceder a él pinchamos en la herramienta pincel  y ahora es el momento de darle un nombre si queremos:



9) Para cambiar el color del pincel, tan sólo lo elegiremos en "muestras" ó pinchando en el cuadradito:



¡Y de esta forma tan fácil ya tenemos un pincel con nuestra firma! ¿A qué ha sido fácil?

lunes, 4 de junio de 2012

Toledo


{Panorámica de Toledo}
Hace ya un mes que nos fuimos de puente a Toledo, y aún no había enseñado ninguna foto. Pretendía ser una escapada romántica a un lugar con encanto y lo fue, pero reconozco que la lluvia no nos dejó disfrutar tanto como nos hubiera gustado. Ver las cosas con lluvia en ocasiones puede tener su encanto también, pero uno tiene que ponerle mucho empeño para apreciar la belleza de las cosas cuando llueve a todo llover y van dos muy juntitos debajo de un paraguas escaso esquivando gente en las mismas circunstancias.

Me gusta visitar lugares que no conozco, perderme en sus calles e ir descubriendo poco a poco edificios y detalles escondidos. Toledo se presta mucho a esto, con sus calles estrechas y serpenteantes que de repente te llevan a plazas y cruces que ni te imaginabas que estarían ahí. Es como emprender una pequeña "aventura", creo que ahí está la gracia, y te vuelves un poco niño otra vez intentando verlo todo, entenderlo todo y guardar las imágenes en la retina para siempre.

A guardar las imágenes ayuda cargar con la cámara, claro, pero cuando llueve a mí se me quitan las ganas de sacarla en primer lugar porque no tengo ganas de que se moje y en segundo lugar porque es incómodo no poder moverte a tus anchas para sacar la toma tal y como tú quieres. Así que no saqué muchas fotos  aunque reconozco que de las pocas que tengo, algunas me gustan mucho. A ver qué os parecen.

{Vista de Toledo}
{Sinagoga}
{Don Quijote}
{Desde el balcón de nuestra habitación}

{Sinagoga}
{Calle desierta}
{La judería de noche}

{El Alcázar presidiendo la ciudad}

Volveremos, eso seguro. A ver si la próxima hace sol.
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